El Inter está sumido en una vorágine autodestructiva de la que no es capaz de salir. Ni el cambio de entrenador ha surtido el efecto deseado. Ranieri no da con la tecla y muchos de sus actos son cuestionados por la afición interista. Su estilo de juego tampoco es del agrado de los tifossi que cada partido llenan el Meazza. El cambio de Sneijder en el descanso ante el Nápoles fue para muchos un tiro en el pie.
Tengo la suerte de tener amigos italianos seguidores del Inter. Ellos dicen cosas como "soy del Inter desde el vientre de mi madre". Y tuve la oportunidad de hablar con uno de elos vía Twitter para que me explicara de primera mano la situación interista. Stéfano Simeoni (@elmagicosimeoni) me dio las claves para conocer lo que pasa desde el punto de vista de un interista puro y duro.
Cuando le pedí la explicación su primera frase fue: "Querido Moy, el Inter sufre unos problemas serios. Su situación dramática no se puede resumir en un solo hecho o persona". Es evidente que culpar a Ranieri por la situación es algo complicado. Es cierto que tiene parte de la responsabilidad pero el descalabro viene de lejos. Y según él, el descalabro viene de un momento determinado: "Empezando desde el triunfo del 2010 faltó totalmente una política societaria adecuada. Se quiso cambiar totalmente de Mou a Benítez". Dos modelos tan opuestos y parecidos. Pero Mourinho es un semidios en la historia neroazzurra por sus exitosas dos temporadas que hizo en el Inter. Benítez iba a tener que llevar esa losa desde el primer día y sus métodos no eran ni mucho menos iguales. La preparación física de Mourinho era muy diferente a la de Benítez y llegaron muchas lesiones de jugadores clave como Maicon, Milito o Sneijder.
El problema fue que se apostó por el técnico español pero "no se le apoyó" ni económica ni institucionalmente. A pesar de todo, para Stéfano: "Benítez fue el último verdadero técnico".
Esta temporada la cosa cambia. Gasperini empezó la temporada pero fue destituído muy pronto tras solo 3 jornadas por Ranieri. Sin embargo el problema es que "falta técnica, preparación atlética y sobretodo mentalidad. Cosa que no existe desde que Mou se fue". La preparación física, sobre todo con jugadores de cierta edad, es fundamental. Así lo ve Stéfano: "Algunos jugadores viejos son intocables, no hay espacio para jóvenes talentos y el entrenador volvió a las ricas obsoletas". Las vacas sagradas siguen mandando en el vestuario y los jóvenes como Ricky o Coutinho son actores secundarios. De hecho el brasileño se ha marchado cedido al Espanyol.
Sobre árbitros también tiene palabras el italiano: "En los últimos 10 años jamas vi un Inter peor. Y que los árbitros pongan lo suyo no nos sirve como excusa". Mentalidad que en España se da bastante poco pero que lleva toda la razón. La situación, en definitiva, es para Stéfano: "Como abrir un paraguas en medio de un huracán. Necesitamos planear y empezar de cero. Y nadie se salva". Y por último los delanteros. Las lesiones de Milito merman mucho el gol del equipo donde ni Pazzini ni Zárate ni Forlán dan la talla. El soplo de aire fresco lo pone el deseado Luc Castaignos pero con pocos minutos. La cesión de un lesionado Guarín da que pensar en cuanto a política de fichajes. Esto se suma a la venta de Eto'o, el mejor jugador del Inter y el que tiró del carro el pasado campeonato. Para Simeoni: "En un equipo de treintañeros no se puede vender a Eto'o.. Balotelli". Un Eto'o que lleva ya 8 goles en 11 partidos con el Anzhi ruso.
En definitiva, los problemas del Inter pesan más ahora por los resultados pero viene de mucho más lejos. Un equipo que ha pasado de ganar la Champions hace año y medio a deambular por el Calcio mirando hacia arriba pero también de reojo hacia abajo.
PD: Muchas gracias a Stéfano por compartir este rato con nosotros.
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