miércoles, 31 de agosto de 2011

Sobre la liga de dos


Barcelona y Madrid, Madrid y Barcelona. Esto es una reflexión del por qué de la superioridad de los dos equipos, dinero aparte, sobre los demás. Es cierto que ganan porque tienen mejores jugadores. Pero pienso, y puedo estar equivocado, que también existe un por qué puramente futbolístico.

Son dos equipos con un potencial muy distinto. El Barcelona basa su fútbol en la superioridad técnica en mediocampo (refrendada con las llegadas de Cesc y Thiago, mientras que el Madrid en su dinamita arriba que incluye velocidad, técnica y finalización.

El Madrid tiene gol arriba. Su delantero es Benzemá, que además ayuda bastante en la elaboración de las jugadas cayendo tanto a bandas como a la zona de mediapunta. Y el gol puramente dicho es de Cristiano Ronaldo, que es teórico extremo. Di María abre el campo por la derecha para dejar espacio a las subidas de Marcelo. Pero la pólvora del equipo reside arriba. Los rivales se defienden contra el Madrid encerrados, más pegados a su portería que frente al Barcelona. Esto hace que los mediocampistas, Xabi y Ozil, tengan más facilidad a la hora de elaborar las jugadas. Una vez elaboradas pasan a piernas de la dinamita.

El Barcelona en cambio tiene en la zona ancha su hábitat natural. Xavi pausa y Messi e Iniesta desbordan. Cesc entra como un puñal desde atrás sorprendiendo y Thiago pone la imaginación al servicio del tiki-taka. Su hombre gol, Messi, empieza jugadas que el mismo acaba rematando. Eso se debe a que los rivales contra el Barcelona presionan más la salida de balón y el epicentro de su defensa es el mediocampo. En este caso la ayuda de Messi es fundamental para salvar las dos primeras líneas de presión con lo que el equipo contrario se encuentra con una oleada de centrocampistas llegando por todos lados, con dos extremos muy abiertos y sin saber que hacer. Ahí radica la fuerza del Barça.

En definitiva, la liga volverá a ser de dos porque el potencial de Barça y Madrid es prácticamente imparable.

viernes, 5 de agosto de 2011

Arranca la Ligue 1, cantera de Europa


Estamos ante la Ligue 1 más apasionante de los últimos años. Varios equipos con el cartel de favoritos al título donde destaca uno principalmente: el PSG del jeque Al Thani (que no es el del Málaga).

La inversión hecha en jugadores como Kevin Gameiro, Menez y, sobre todo, Pastore sumándole lo que ya había (Nené, Sakho o Hoarau) lo convierte en el Máximo aspirante a ganar el título. En París ya sueñan con que la dupla Gameiro- Pastore les devuelva a la senda de los títulos. Títulos a base de talonario.

El Marsella por su parte se encomienda a los Kaboré, Lucho González (que se queda finalmente) y, sobre todo, Valbuena. El veloz mediapunta tiene que explotar definitivamente y convertirse en el buque insignia del campeón de la 09/10.

Detrás de ellos llega el actual campeón, el Lille. Esperando buenas nuevas sobre la continuidad de Hazard, por ahí basa su favoritismo el equipo de Rudi García. Las marchas de Gervinho y Ramí tendrán que ser paliadas con el gol de Sow y la experiencia de un Benôit Pedretti que llega para demostrar que todavía tiene mucho fútbol en sus botas.

El siempre peligroso Lyon afila sus garras mientras siguen esperando que Gourcuff despierte de un letargo que ya impacienta a la entidad. Está claro que si lo consigue, el Lyon será máximo favorito al título ya que es el jugador con más clase de toda la Ligue 1. Mientras tanto, todo dependerá de una gran defensa, un centro del campo trabajador (a pesar de la marcha de Toulalan) y, sobre todo, de los puntales Hugo Lloris en la portería, y Lisandro López en el área rival.

Me gustaría destacar otro equipo que puede dar que hablar por la calidad de sus jugadores más jóvenes: el Toulouse con el trío Capoue-Sissokho-Fofana a la cabeza y el jovencísimo Emmanuel Riviere en la punta de ataque.

En definitiva, una Ligue 1 apasionante con grandes jugadores y muchas jóvenes promesas esperando explotar para dar el salto a cualquier grande que se pueda permitir el lujo de pagar lo que pidan los equipos franceses. Por eso la Ligue 1 es la cantera de Europa.